Nefrostomía percutánea

Qué es una nefrostomía y para qué sirve:

Una nefrostomía percutánea (NPC) es un catéter de derivación urinaria consistente en un tubo flexible de pequeño calibre multiperforado que se coloca directamente desde la piel al riñón, en la región lumbar, para permitir la salida de orina al exterior. Por lo tanto, el paciente portará un tubo de drenaje de la orina al exterior, por la espalda, que irá conectado a una bolsa recolectora.

Su función es similar a la del CDJ, estando indicado principalmente cuando la compresión es extrínseca (fuera de la vía urinaria) (patología oncológica o fibrosis retroperitoneal) o cuando no ha sido posible la colocación de un CDJ.

En ocasiones, en necesario la colocación de este tipo de dispositivos antes o al finalizar una cirugía de litiasis urinaria para facilitar la salida de orina, fragmentos litiásicos, controlar el sangrado o disminuir el riesgo de infección.

Existe una pequeña evidencia científica que recomienda la nefrostomía percutánea sobre el catéter ureteral retrógrado en el tratamiento de la hidronefrosis con datos de infección.

También existe cierta evidencia que sugiere que los catéteres ureterales tienen más complicaciones que las nefrostomías.

Causas para la inserción de un tubo de Nefrostomía:

  • Uropatía obstructiva (85-90%)
    • De causa benigna:
      • Litiasis (más frecuente)
      • Coágulos de sangre
      • Fibrosis post-quirúrgica
      • Fibrosis retroperitoneal
    • De causa maligna: enfermedad tumoral pélvica extrínseca:
      • Tumor ginecológico
      • Tumor digestivo
      • Tumor urológico (vejiga o próstata)
      • Carcinomatosis
      • Masas adenopáticas
  • Para el manejo de la fístula urinaria
  • Para realizar procedimientos terapéuticos sobre el uréter
    • Colocación de stent ureteral
    • Dilatación ureteral
    • Extracción de cuerpos extraños
    • Extracción de litiasis
  • Otros: pre-quimioterapia,…

Procedimiento de colocación de una nefrostomía:

La colocación de una nefrostomía, se puede realizar bajo anestesia local, sedación, regional (similar a la epidural) o anestesia general.

Habitualmente el procedimiento se realiza con ayuda de ecografía, para localizar el riñón y controlar el sitio por donde se va a realizar la punción, y evitar lesionar órganos vecinos (hígado, bazo, colon). Posteriormente se suele confirmar su correcta posición introduciendo contraste a su través y realizando control mediante Rayos X.

Si no existen complicaciones, la intervención dura unos minutos.

Según la causa y la situación clínica del paciente, tras un tiempo de observación, el paciente puede ser dado de alta o precisar ingreso hasta mejoría de ciertos parámetros clínicos y/o analíticos que hayan promovido la colocación de dicha nefrostomía.

La NPC se suele recambiar cada 3 meses, mediante un pequeño procedimiento ambulatorio, sin necesidad de ingreso. El tiempo de permanencia, será determinado por su urólogo, según la patología de base que haya obligado a su inserción.

Riesgos de la colocación de un tubo de NPC:

  • Hematuria
  • Dolor
  • Hematoma perirrenal
  • Perforación intestinal o lesión de otras vísceras vecinas, principalmente hígado o bazo
  • Infección
  • Urinoma o colección de orina abdominal
  • Fístula arteriovenosa
  • No se ha demostrado un deterioro de la función renal
Extraído del Tratado de Urología de la AEU
ISBN: 978-84-09-16825-5

Síntomas asociados a una NPC:

Si usted porta un tubo de nefrostomía, es normal que presente:

  • Molestias en el sitio de introducción de la sonda de nefrostomía.
  • Sangre en la orina.
  • Irritación en la piel en el sitio de introducción.
  • Pérdida ocasional de pequeñas cantidades de orina en torno a la sonda
  • Pequeños coágulos ocasionales, que pueden incrementarse con la actividad física.

Deberá acudir a urgencias si presenta:

  • Fiebre
  • Ausencia de salida de orina a través de la nefrostomía y/o abundante salida de orina alrededor de la sonda de nefrostomía
  • Arrancamiento de la misma
  • Sangrado por la orina que no cesa a pesar de aumentar ingesta hídrica y reposo, o aparición de múltiples coágulos
  • Enrojecimiento de la piel alrededor de la inserción de la nefrostomía, asociado a calor local y dolor al tacto
  • Dolor renal intenso a pesar de analgesia habitual

Cuidados de la nefrostomía:

  • Beba abundante líquido
  • Puede tomar los analgésicos que su médico le prescriba
  • Evite tirones
  • Mientras porte el tubo de nefrostomía, puede ducharse con normalidad (tanto el tubo como la bolsa pueden mojarse). Si el apósito se ha mojado, deberá cambiarlo. Evite los baños de inmersión
  • Vacíe la bolsa de drenaje antes de que se llene.
  • Mantenga limpia la piel alrededor del sitio de la incisión y cambie el vendaje con frecuencia. Es importante impedir el ingreso de bacterias y gérmenes en el sistema de drenaje de orina.

Procedimiento para la retirada de una NPC:

La retirada de una nefrostomía es un gesto sencillo, que se realiza de forma ambulatoria y sin necesidad de anestesia. Se tardan escasos segundos. El médico o la enfermera tirarán suavemente del tubo hasta su retirada completa

Es posible que el paciente presente molestias lumbares tras el procedimiento, o salida de orina o sangre a través del orificio de la nefrostomía. Es habitual que se cierre en el transcurso de las siguientes 24-48horas. Si presentase fiebre, dolor intenso en región lumbar, ausencia de diuresis, o sangrado abundante, deberá acudir al Servicio de Urgencias.

BIBLIOGRAFÍA:

  • EAU Guidelines on Urolithiasis. C. Turk. 2021
  • Sociedad española de Radiología Vascular e Intervencionista
  • González E.l.: “Evaluación retrospectiva de las complicaciones en pacientes sometidos a derivaciones percutáneas de la vía urinaria en un centro médico de tercer nivel de la ciudad de Bucaramanga”. Intervencionismo. 2019;19(1):16-20
  • Rodríguez Pontones J.A.  y Bretón-Reyes D.: “Complicaciones en pacientes sometidos a nefrostomía percutánea guiada por ultrasonido y factores asociados” Gac Med Mex. 2016; 152:167-72